2024

La profecía del Monje Jorge de Burgos de “El nombre de la Rosa”

El monje Jorge de Burgos en el film “El nombre de la Rosa” de Jean-Jacqes Annaud de 1986 Un gran escritor del siglo XX, brillante en su erudición, pero con un pensamiento que rechaza la luminosidad más profunda de la Edad Media, en su libro, “El Nombre de la Rosa”, realza la importancia de Guillermo de Ockham -Guillermo de Baskerville en la obra- quién instaura la corriente del nominalismo en la Iglesia Romana, poniendo en crisis la corriente en ese momento dominante, la escolástica.

Para San Agustín, la razón debe subordinarse a la Fe, y a través de esta última, el pensamiento se orienta positivamente; por su parte, para Santo Tomás, la razón y la Fe siguen caminos diferentes, pero al final, no entrarían en contradicción. Guillermo de Ockham, en cambio, dirá que la Fe y la Razón se separaban como dos verdades distintas, con un gran espacio entre ellas. De este razonamiento teológico especulativo, nacerá el nominalismo, una forma de redefinir los conceptos en el mundo, rompiendo su relación con lo sobre-natural. Los conceptos son realidades de carácter lingüístico, nominalista, una lectura de signos, indicios. Aparta el conocimiento metafísico de la realidad, que pasa a ser un conocimiento de carácter inductivo, empírico. De alguna manera, Ockham, pone las bases del futuro empirismo que desarrollaría David Hume, produciendo el divorcio completo entre la Ciencia y la Religión.

El autor de la novela, Umberto Eco, deja traslucir lo que él entiende como el oscurantismo medieval, y esto se encuentra representado en el papel que cumple en dicha obra, el monje Jorge de Burgos. Este personaje, siendo bibliotecario, estará protegiendo a la cristiandad de no caer precisamente en la desviación moderna. En escenas del film de Jean-Jacques Annaud transcribimos: “deberían prohibirle usar estos libros con toda libertad. Hay verdades que podrían hacernos dudar y la duda es enemiga de la fe” (1). Hoy en día, dicha frase despertaría rechazo, pero lo cierto es que precisamente, lo dicho en el libro por el monje, cobró realidad.

Umberto Eco, pone en palabras del monje Jorge de Burgos una profecía que terminaría cumpliéndose, para desgracia del autor de la novela: En el mismo film referido, debatiendo con Guillermo, sobre la importancia de un libro de Aristóteles, “La Poética”, el monje nos dice: “La risa mata el miedo y sin miedo no puede haber Fe, porque sin miedo al Diablo ya no hay necesidad de Fe” (2). Más adelante, el diálogo del Monje Jorge de Burgos continúa: “La risa seguirá siendo la diversión del hombre sencillo, pero ocurrirá si por culpa de este libro, los hombres DOCTOS declararán que es permisivo reírse de TODAS LAS COSAS. Pudiendo reírnos de Dios, el mundo desembocaría en el caos, por eso, he de sellar lo que no debe ser dicho, y me convierta en su tumba”.(3)

Ya propiamente en el libro, y con un rico lenguaje propio de la erudición de Umberto Eco, leemos:

“Si la risa es la distracción de la plebe, la licencia de la plebe debe ser refrenada y humillada y atemorizada mediante la severidad. Y la plebe carece de armas para afinar su risa hasta convertirla en un instrumento contra la seriedad de los pastores que deben conducirla hacia la vida eterna y sustraerla a las seducciones del vientre, de las partes pudendas, de la comida, de sus sórdidos deseos. Pero si algún día alguien, esgrimiendo las palabras del Filósofo y hablando, por tanto, como filósofo, elevase el arte de la risa al rango de arma sutil, si la retórica de la convicción es reemplazada por la retórica de la irrisión, si la tópica de la construcción paciente y salvadora de las imágenes de la redención es reemplazada por la tópica de la destrucción impaciente y del desbarajuste de todas las imágenes más santas y venerables… ¡Oh, ese día también tú, Guillermo, y todo tu saber, quedaríais destruidos!” (“El nombre de la Rosa” de Umberto Eco, pág. 644-645)

La profecía que implícitamente se lee, se ha cumplido. Hoy no existe nada SAGRADO para este mundo que vivimos.


(*) NOTAS: Fuente: (1) La frase corresponde al guión del film “El Nombre de la Rosa” de Jean-Jacques Annaud. Ver en: https://www.youtube.com/watch?v=PNob3aUzOSU&fbclid=IwAR12Q03C29RMzK5QUVDYuU WrCVgBr02BEjJuJp1tkppEwbg9v4enZL1wPgU

(2) Idem ant.

(3) Idem ant. (*)

Vladyka TEOFANO, Juan Manuel Garayalde, es argentino, nacido en la ciudad de Concordia, Argentina, en 1973. En el año 2007, es ordenado sacerdote en la Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava en el Extranjero (IOBE). En el año 2009, por economía eclesiástica, es elevado al Episcopado, siendo obispo coadjutor del Archieparca de San Vicente, Vladyka FRANCISCO, Franc Primozic. En el año 2010 culmina el Posgrado en Teología Ortodoxa brindado por el Patriarcal Ateneo San Marcos (PASM). Posteriormente asume funciones dentro del PASM responsable de formación para seminaristas y laicos. Desde el año 2013, es responsable de la Secretaria de Asuntos Externos del Patriarcado.

Juan Manuel Garayalde

Juan Manuel Garayalde, sacerdote en la República Argentina, de la Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava en el Extranjero

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